El bruxismo es el (mal) hábito de apretar los dientes de forma inconsciente, apretando la mandíbula (de día) o rechinando los dientes (durante el sueño), produciendo su desgaste.
Se puede producir tanto durante el día como mientras el paciente duerme. Este último caso es más frecuente, y el más problemático, ya que la persona que lo sufre no es consciente de ello, y es, en la mayoría de los casos, otra persona la que advierte del problema al paciente, al escucharlo rechinar mientras duerme, o el propio dentista, quien, tras realizar una revisión, comprueba el desgaste producido, e informa del problema.
Aunque el bruxismo suele asociarse a pacientes adultos, lo cierto es que los niños también pueden padecer esta dolencia, incluso los bebés.
CAUSAS
Aunque hay diferentes teorías sobre el origen del bruxismo, lo cierto es que no se conoce una causa real en la que coincidan los expertos.
Un gran número defiende que el estrés y los trastornos de sueño son los causantes, aunque otros factores que inflyen en el bruxismo son:
SÍNTOMAS
Al rechinar o apretar los dientes, se ejerce presión sobre músculos, tejidos y estructuras alrededor de la mandíbula, lo cual puede causar problemas en la Articulación Temporomandibular (ATM), desgaste, hipersensibilidad dental y dolor constante en los músculos de la mandíbula y dientes.
Algunos síntomas que pueden indicar que se sufre bruxismo son:
Si el problema del que hablamos no se corrige a tiempo, suele dar como resultado patologías o alteraciones articulares, por lo que si se sospecha que se puede padecer este problema, es necesario acudir a un buen profesional que haga un diagnóstico correcto, pues ¡mucho cuidado! No todo siempre es bruxismo, y hay muchas veces en las que se diagnostica este problema de forma incorrecta.
TRATAMIENTO
El especialista en ATM es el encargado de realizar el diagnóstico correcto y definir el tratamiento adecuado, tras valorar las circunstancias físicas y psicológicas que lo causan. Según sean estas, serán los tratamientos a implantar; se suele aconsejar realizar actividades que ayuden a controlar el estrés y cambiar hábitos negativos, pero una vez diagnosticado el problema de bruxismo, hay dos posibles tratamientos en clínica:
- Férula de descarga. Una férula de descarga o de relajación es una dispositivo que se coloca en una de las arcadas, el cual actúa de distintas formas, una de ellas es ferulizando los dientes, de ahí su nombre, todos los dientes unidos reparten las fuerzas que se ejercen en la mordida, también se levanta la altura funcional y se cambia el patrón neuromuscular, dejado en un estado de relajación toda la musculatura y articulaciones.
- Rehabilitación protésica. Cuando el bruxismo es severo y se ha desgastado de forma importante los dientes, es necesario realizar un estudio del estado general de la boca, donde el dentista ofrece una solución restauradora para devolver a la boca su funcionalidad y estética.
Si crees que sufres este problema, acude a un profesional que te ofrezca un diagnóstico adecuado para solucionarlo.