El cáncer oral es una enfermedad con alta mortalidad, que se sitúa entre los 10 cánceres más frecuentes, dependiendo del país y región del mundo.
Se trata, generalmente, de un proceso que afecta a hombres de mediana edad, aunque estamos comprobando un incremento en mujeres y también en jóvenes.
Las cifras. En 2020:
Uno de los principales peligros de este tipo de cáncer es, que puede pasar desapercibido durante sus estadios iniciales, por lo que muchas veces se encuentra avanzado cuando el paciente requiere cuidados. Aunque el 40% de lesiones cancerosas se localizan en la lengua y el 30% en el suelo de la boca, también pueden aparecer en labios, paladar, encías, amígdalas y la zona orofaríngea. El diagnóstico precoz es capaz de doblar la supervivencia a los 5 años.
Factores de riesgo
El cáncer oral está fuertemente relacionado con la edad y género de la persona que lo sufre. Como hemos dicho, es más probable en hombres a partir de los 40 años. Pero el estilo de vida también es importante: nueve de cada diez casos están relacionados con factores de riesgo, como el tabaco o el consumo excesivo de alcohol.
Los hábitos y elecciones que tomamos para nuestra salud son muy importantes. Cambiando estos hábitos, dando pequeños pasos día a día, podemos ayudar a reducir las posibilidades de desarrollar cáncer oral.
Es básico mantener unos hábitos de vida saludables, sobre todo, los relacionados con los siguientes factores:
Tabaco, el gran relacionado.
Es la principal causa de cáncer oral. Cerca del 80% de los casos de cáncer oral se relacionan con el consumo de tabaco. El humo de los cigarrillos contiene alrededor de 60 carcinógenos conocidos. El riesgo de padecer cáncer oral aumenta significativamente cuando el consumo de cigarrillos diario es mayor de 20 unidades, la duración del hábito es superior a 20 años, y en aquellas personas que comienzan a fumar antes de los 15 años. Tampoco el tabaco para masticar o los cigarrillos electrónicos, tan comunes últimamente, son alternativas seguras al uso de los cigarros tradicionales.
Es importante tener en cuenta que dejar el hábito de fumar determina una dismunución del riesgo de cáncer oral del 35% después de un periodo de 1 a 4 años, mientras que después de 20 años de haber dejado este perjudicial hábito, el riesgo se vuelve similar al de una persona que nunca ha fumado.
El alcohol, elevador de riesgo
Aunque el riesgo de cáncer oral se suele asociar con el hábito de fumar, hay otros factores de riesgo muy importantes, como el consumo de alcohol. Este puede aumentar el riesgo hasta 6 veces frente a las personas no bebedoras. Además, se ha comprobado que la suma del consumo de alcohol y tabaco incrementa aún más el riesgo.
El Virus del Papiloma Humano
La incidencia del cáncer oral asociado a VPH varía según la etnia y el lugar geográfico, siendo más frecuente en el norte de América, Europa y Japón. España y los países del sur de Europa ocupan un lugar intermedio.
Es más prevalente en los hombres que en las mujeres, sobre todo entre los 30-35 y los 60-65 años, aunque en la actualidad se está detectando cada vez más en hombres jóvenes.
Practicar sexo seguro y la vacunación contra el VPH para ambos sexos son las mejores opciones para prevenir la infección oral por VPH y la aparición de un carcinoma oral asociado.
La dieta y el cáncer oral
La asociación entre nutrición y cáncer oral es controvertida, y aún a día de hoy no hay nada claro. Algunos alimentos se han relacionado con un aumento del riesgo, mientras que otros se consideran protectores.
La dieta mediterránea, que incluye el consumo frecuente de frutas y verduras variadas, cereales y pescados, así como el uso de aceite de oliva virgen extra en la cocina, y un consumo moderado de carnes y productos lácteos, previene el cáncer oral. Es más, un alto consumo de frutas y vegetales ha demostrado tener un efecto protector frente a este tipo de cáncer.
La exposición solar y el cáncer oral
La radiación ultravioleta B se considera la principal responsable del cáncer de piel y de labio. Los estudios epidemiológicos han revelado que la incidencia del cáncer de piel y de labios es más alta en personas que residen en áreas con altos niveles de radiación solar. El origen étnico y el fototipo de piel también interviene en su incidencia, de hecho, es más común en personas europeas, con un tono de piel más blanca, más sensibles al sol y con menos protección frente a los rayos UVB que las personas de piel oscura. También se asocia a personas que, por las características de su trabajo, pasan mucho tiempo expuestas al Sol, por lo que la exposición a la luz solar de los labios se considera el factor de riesgo más importante en el desarrollo de un cáncer labial. Es muy importante usa protección solar labial mientras se está expuesto al Sol, sobre todo en las horas de mayor incidencia de radiación solar.
Evita el cáncer oral
La detección precoz del cáncer oral es clave para combatirlo. En España se consigue identificar de manera temprana solamente 3 de cada 10 tumores. La enfermedad suele comenzar con una úlcera que no se cura. También dolor, hinchazón, sangrado y dificultad al masticar o al tragar.
Más del 70% de los cánceres orales están precedidos de lesiones orales potencialmente malignas, como manchas rojas o blancas persistentes en la boca. Las localizaciones más comunes son la lengua, el interior de las mejillas y el suelo de la boca.
Es de suma importancia la vigilancia, y si se tiene algún tipo de vida, acudir a consulta. Entre todos, podemos combatir el cáncer oral y sus consecuencias.
No lo dejes, ¡estamos preparados!
¿Tienes algún tipo de duda? Te dejamos un cuestionario, para que, contestando a unas rápidas preguntas, puedas conocer tu riesgo de inmediato. Ten en cuenta que esta información es meramente orientativa, y en absoluto sustituye un diagnóstico definitivo realizado por un profesional.